Esta entrada va a ser
un poco diferente a las otras de “Basado en…”, y la razón es que esta vez no os
voy a hablar de la adaptación cinematográfica de un libro, sino de la
adaptación al teatro.
Diez Negritos, cuyo
título original es And then there were none, considerado uno de los grandes libros de misterio de Agatha
Christie, cumplió, en 2014, 75 años, por
lo que, en su conmemoración, en Madrid, desde el 1 de octubre de 2014, en el
Teatro Muñoz Seca, se viene representando esta obra.
El domingo pasado nos
animamos mi novio y yo a ir, y puedo decir que no solo es una brillante
adaptación del libro, sino que es una obra maravillosa.
El teatro en el que
se representa no es muy grande, pero es acogedor. Cuando se apagan las luces, y
antes de abrir el telón, empieza a escucharse una vieja canción de cuna, con
voces infantiles:
Diez negritos
se fueron a cenar;
uno se asfixió
y quedaron nueve.
Nueve negritos
estuvieron despiertos hasta muy tarde;
uno se quedó
dormido y entonces quedaron ocho.
Ocho negritos
viajaron por Devon;
uno dijo que
se quedaría allí y quedaron siete.
Siete negritos
cortaron leña;
uno se cortó
en dos y quedaron seis.
Seis negritos
jugaron con una colmena;
una abeja picó
a uno de ellos y quedaron cinco.
Cinco negritos
estudiaron Derecho;
uno se hizo
magistrado y quedaron cuatro.
Cuatro
negritos fueron al mar;
un arenque
rojo se tragó a uno y quedaron tres.
Tres negritos
pasearon por el zoo;
un gran oso
atacó a uno y quedaron dos.
Dos negritos
se sentaron al sol;
uno de ellos
se tostó y solo quedó uno.
Un negrito
quedó solo;
se ahorcó y no
quedó ninguno.
Esta canción sirve de
guía para todo lo que va a acontecer después y hace que el espectador entre de
lleno en la historia.
Para centraros el
argumento, por si no conocéis el libro (¡¡YA ESTAIS TARDANDO EN LEERLO!!) gira
entorno a personajes (no os lo
esperabais, ehhh, jejejejeje) que reciben una invitación para pasar un fin de
semana en la Isla del Negro. La primera noche, por medio de una grabación, el
que parece ser el autor real de sus invitaciones les acusa de haber cometido un
acto atroz en su vida, un asesinato, delito por el que nunca fueron condenados.
Por supuesto, cuando termina la grabación todos se apresuran a desmentirlo. No
tardará en caer el primero de ellos, en una sucesión de acusaciones,
confesiones, miedos que llevarán la mente del espectador/lector al límite,
mientras vé como uno a uno los invitados
van siendo asesinados sin saber quién puede ser el autor.
Pese a ser en teatro,
los actores logran no solo mantener tu atención, sino que te envuelven en un halo
de misterio que despierta tus sentidos. Algunas escenas sacan sonrisas, incluso
carcajadas y otras te dejan pegado a tu asiento y con el corazón acelerado.
Sin duda, si os gusta
Agatha Christie o el buen teatro y estáis por Madrid, os animo a que paséis una
buena tarde o noche en el teatro. ¿Acaso hay algo mejor?. Y luego, unos
pinchitos o unas copitas para comentar la obra con los amigos/pareja/familia.
Ojalá haya una representación en mi ciudad o alrededores. Me alegro que te gustara.
ResponderEliminarUn beso :)
El libro me encanta, así que estaré atenta a ver si la representación llega a mi ciudad algún día, tiene que estar bien :P Es de mis libros preferidos de la autora ^^
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