Pídeme lo que quieras

Autor: Megan Maxwell

Nº de páginas: 464 págs.

Editorial: Plantea

Lengua: Español

Encuadernación: Tapa blanda

ISBN: 9788408034513

Año edición: 2012

Plaza de edición: Barcelona

Precio: 14,90 euros.

Tras la muerte de su padre, el prestigioso empresario alemán Eric Zimmerman decide viajar a España para supervisar las delegaciones de la empresa Müller. En la oficina central de Madrid conoce a Judith, una joven ingeniosa y simpática de la que se encapricha de inmediato. Judith sucumbe a la atracción que el alemán ejerce sobre ella y acepta formar parte de sus juegos sexuales, repletos de fantasías y erotismo. Junto a él aprenderá que todos llevamos dentro un voyeur, y que las personas se dividen en sumisas y dominantes... Pero el tiempo pasa, la relación se intensifica y Eric empieza a temer que se descubra su secreto, algo que podría marcar el principio o el fin de la relación.

Definitivamente estoy a un libro de llegar a mi tope con la literatura erótica, y no porque siga todos los libros de ahora el mismo patrón, sino porque me gusta poco la erótica, y los libros de ahora cada vez tiene más cama, lo cual hace que yo acabe saturada.

Pues aquí tenemos el primer libro erótico de Megan Maxwell. Al parecer no hay nada que se le resista a esta mujer y me alegra saberlo (¿para cuándo un thriller romántico? Yo lo dejo caer Megan…).

Hoy me apetece esquematizar un poco la reseña, así que voy a dividir la reseña en lo que me ha gustado y lo que no.

¿Sois de los que prefieren primero las malas o las buenas noticias? Bueno, yo siempre prefiero un chute de positividad, así que os dejo primero las buenas:

Lo que me ha gustado del libro:

1.- Como siempre, lo mejor y más destacable de los libros de Megan Maxwell es su estilo, su forma de escribir fresca, directa, en ocasiones guionizado, como si estuvieras viendo una película en vez de leyendo un libro.

2.- Dentro del boom erótico que hay últimamente, es original el tema que trata (yo no había leído nada sobre él), dado que no trata del famoso BDSM que tenemos últimamente hasta en la sopa.

3.- La protagonista femenina, Judith, es lo mejor del libro sin ninguna duda. Tiene una par de ovarios, sabe plantar cara a todo el que se le ponga por delante, es fuerte, valiente, decidida, divertida…. Vamos, que estas protagonistas son las que deberían tener todos los libros eróticos que están saliendo últimamente.

4.- Los personajes secundarios, como ya me tiene acostumbra la escritora, aportan ese punto de color a la novela, complementan las historias y son fundamentales para su desarrollo.

5.- Hay mucho diálogo, lo que hace que su lectura sea más rápida y te enganche con facilidad.

Lo que no me ha gustado del libro:

1.- La temática. No me ha gustado nada. Pero nada.  Esto no es culpa de la escritora que trata el tema con bastante respeto y delicadeza, pero es que a mí no me va nada el tema del voayerismo (lo siento, yo no llevo un voayer dentro), no me gusta el tema de compartir (soy muy fan de la monogamia en la cama) y en definitiva, que no me atrajo nada de nada la relación sexual y los jueguecitos que se traían los protagonistas. De hecho, creo que soy demasiado convencional para este tema, porque yo eso de que el hombre ofrezca su mujer a otros hombre me tira para atrás. Y lo de los tríos y esas cosas no me motivan en las novelas románticas. Así que esto ha sido un problema a la hora de adentrarme en la historia, aunque llegó un momento que decidí dejarlo pasar y centrarme solo en la historia de amor.

2.- El supuesto trauma de Mr. Zimmerman no me causó el impacto que me esperaba, quizás en el segundo libro entendamos mejor todo lo que le rodea y logre conmoverme.

3.- Esta queja es absurda, dado que estamos ante un libro erótico, pero es que creo que hay demasiadas escenas de cama. ¡¡¡lo sé, lo sé!!! Es de tontos comprar un libro erótico y pensar que va a haber solo dos o tres escenas de cama…Recordar que soy rubia, pero es que desde la primera página hay una escena de sexo!!

Bueno, pues vistas mis valoraciones de lo que me ha gustado y lo que no, os diré que es un libro bastante entretenido, muy original, que tiene esa esencia de la escritora que tanto gusta y, además, si os gusta la novela erótica os va a encantar (creo que el problema ha sido que a mí no me termina de gustar la erótica). Yo os animo a leerlo y a que luego me os comentéis que os ha parecido.

¿Me leeré la segunda parte? SÍ, porque ese final es de los de traca. Y como al final me enganché a la historia de los protagonistas, pues me dejó con el corazón en un puño y eso no se hace Megan Maxwell.